jueves, 2 de septiembre de 2010

> El fin del verano

Cuando tengamos mucho tiempo y más recuerdos que planes, recordaremos de la infancia sobre todo estos días de verano en los que el calor resbalaba por nuestros cuerpos labrados de felicidad: esos días de playa tirándonos una y otra vez de cabeza desde el espigón, la piel tirante por la sal, el picor de la insolación. Recordaremos ese descampado en ruinas donde ahora hay un centro comercial, esos juegos peligrosos donde ahora hay carteles de prohibición.

“Estos cielos azules y este sol de la infancia” fue el último verso que Antonio Machado escribió antes de morir y que encontraron escrito en un papel arrugado en el bolsillo de su gabán en Colliure.

No hay comentarios:

Publicar un comentario