lunes, 27 de junio de 2011

> Y luego critican por criticar a Chacón

Ayer domingo la ministra Chacón dió una rueda de prensa para informar del atentado a tropas españolas en Afganistán, en el que han muerto dos militares y varios han resultado heridos. El caso es que estaba viendo el canal de noticias de TVE cuando a las siete y cuarto han conectado con el ministerio de defensa para informar de la rueda de prensa. Bueno, no: la ministra estaba esperando a que el canal conectara para empezar ella. Un asesor entre bambalinas le ha hecho una señal para que supiera que TVE ya había conectado y la ministra se ha puesto a hablar (a leer) lo que marcaba el día. Ay, a esta excandidata le gustan en demasía los focos (ya recordarán cuando anunció la retirada unilateral de Bosnia).

Esta mañana la he vuelto a ver ante las cámaras, en Afganistán, para decir que los soldados españoles están afrontando una muy difícil situación (de acuerdo), pero como con eso no tenía bastante ha dicho además que los militares españoles son los más valientes de todos. Ya se sabe que los italianos son cobardes, los franceses apocados, los americanos miedosos, los británicos gallinitas y los alemanes bebedores. Pero ¿hacía falta decirlo así de claro?

La excandidata supedita su pasión mediática a su autoridad como ministra. Qué excandidata gana España.

sábado, 25 de junio de 2011

> Muertos

Desde hace un tiempo me intereso por rastrear a mis antepasados, por simple curiosidad. He conseguido remontarme varios siglos atrás ayudado unas veces por el trabajo y otras por la suerte. Mis ancestros han vivido en varias ciudades y han tenido diversas ocupaciones (jornaleros, militares, comerciantes), pero todos ellos con el paso del tiempo han adquirido una cualidad común: se han muerto para siempre. Ninguno de ellos fue famoso, y de ellos sólo queda hoy, tras una larga consulta de libros parroquiales y padrones, apenas un nombre, unas fechas y un lugar. De lo que pensaron y vivieron no queda ni rastro, y sin embargo fueron personas como usted y como yo.

Pero no hace falta remontarse siglos atrás. De mi propio padre nadie se acordará cuando yo haya muerto, será a todos los efectos como si no hubiera vivido. Y lo mismo me ocurrirá a mí. Es desoladoramente obvio y certero, no hay forma de evitarlo. Es un dolor presente saber que estamos perdidos de antemano, porque tras nuestra muerte eso no nos importará lo más mínimo, porque no quedará ni el recuerdo. Nuestro primer beso, el segundo desengaño y el sabor del caliche aún existen porque están en nuestra memoria, pero están condenados a disolverse en polvo, ni tan siquiera en polvo enamorado.

Todos conocemos esta historia, y de tan evidente resulta ingenua. La moraleja puede ser la escena de los retratos de "El club de los poetas muertos", pero ésa también es ingenua y ya nos la sabemos. Lo peor no es el resultado, sino que no tiene remedio.

miércoles, 15 de junio de 2011

> Ilusión

Parece, pero no es. Hay que ahorrar no sólo agua, sino también en jardineros, así que el ayuntamiento ha decidido en vez de plantar césped, extender una alfombra plástica que lo parece.

Sin embargo esta decisión tiene consecuencias. Por ejemplo, cuando uno se acerca a menos de tres metros y se da cuenta del trampantojo, se pone triste (yo me puse triste cuando lo vi). También es conocido que la cutrez atrae a la cutrez, y así a los pocos días de su colocación todo estaba lleno de desperdicios (¿qué argumento hay para respetar lo que ni se respeta a sí mismo si a duras penas se consigue con lo real?). Vemos un decorado.

lunes, 13 de junio de 2011

> “- ¿Me pasa usted el canapé, por favor?”

El jueves pasado, se celebró (nunca mejor dicho) en Valencia el inicio de la nueva legislatura autonómica en el parlamento. El periódico ‘El País’ lo calificó al día siguiente como ‘esperpento’ porque más del diez por ciento de los parlamentarios, empezando por el presidente autonómico, están imputados en casos de corrupción (Gürtel, Brugal, etc), y porque el nuevo presidente de la cámara juró el cargo con un crucifico que se había traído (o hecho traer) de su despacho. Esto último es una anécdota.

Después de tan agotador trabajo inaugurando el año legislativo, sus señorías asistieron a un ágape para 250 personas (los parlamentarios son 99) que parece costó 18.000 euros. Los únicos que no asistieron fueron los de IU y, supongo, Compromís. A unos metros, en la calle, unos cientos de manifestantes ‘Indignados’ fueron corridos por la policía.

En aquel punto concreto de Valencia se juntaron en esos momentos varios mundos que no se enteraban de la existencia de los otros: los del PP organizando la comilona y aplaudiendo satisfechos, los del PSOE asistiendo para que no sobrara nada de jamón del bueno, la policía repartiendo porras, los del 15-M poniendo el lomo y los votantes del PP y del PSOE en la cola del paro después de haber votado. Pero no hay que hacerse mala sangre: ésta es la grandeza de la democracia, que los valencianos tienen lo que quieren. Qué tranquilidad.

martes, 7 de junio de 2011

> Haciendo amigos

Como para ganarme la vida no tengo que contentar a nadie (suerte que no es poca), me puedo permitir el lujo de decir que hay muchos españoles indecentes. Y no me refiero a los miles de chorizos, aprovechados, chapuceros…: no, pero también. Me refiero a los que con su voto (masivo) han revalidado los mandatos de políticos como Camps, Barberá, León de la Riva… Qué triste (por si me quedaba un poco de optimismo).

Por suerte, hay muchos españoles al menos algo más sensatos. Aquellos que han desalojado de muchos gobiernos a los (algunos) mediocres (cuando no otra cosa) del PSOE.

E incluso hay españoles con ideales, los que acampan en plazas desde el 15-M y los que les apoyan. Lástima que sean tan pocos y que esas ideas sean tan vagas, dispares, efímeras, festivas…