lunes, 28 de junio de 2010

> Gobernanza

En estos tiempos de sequía de líderes e inflación de comentaristas, las novedades que parecen esconder alguna sustancia tienen éxito asegurado. Hace unos meses el expresidente Felipe González acuñó la palabra ‘gobernanza’ para referirse al buen gobierno europeo. Uno puede estar de acuerdo o en desacuerdo con Felipe González, pero no creo que haya muchos que le nieguen la personalidad de líder nato. Lo que dice, aunque algunas veces no haya por dónde cogerlo, tiene un plus de valor y unas raíces que con poca tierra se pegarán al terreno.

La palabra que creó no solamente ha tenido éxito entre la clase política y periodistas por venir de quien viene. Parte de su fortuna también se la debe a esa disonancia de ‘gobierno’ y ‘bonanza’, palabras antitéticas en estos tiempos como siempre de zozobra. Pero en realidad la palabra no existe en el diccionario. Tampoco define ninguna sustancia nueva, que para eso está ya la simple palabra, tan denostada, de ‘gobierno’.

Pero, ¡ay!, necesitamos forraje nuevo y la ilusión de un pastor que ni está ni se le espera.

viernes, 25 de junio de 2010

> Reseña: “El viaje al poder de la mente”, de Eduardo Punset

Con algunos libros uno tiene problemas. Punset me cae muy bien, pero no entiendo lo que dice ni cómo lo dice, ni tan siquiera por qué lo dice: ¡ya me gustaría!

El libro es una narración de sus encuentros con eminentes investigadores que apuntan recientes descubrimientos, sobre todo en el campo neurológico y del comportamiento humano. También hay ejemplos, extraños, muy extraños, de amigos que ejemplifican esos hallazgos. Y hay muchos recuerdos personales (su perro, sus nietas, sus viajes).

Leer un libro y no irse enterando de nada, y no por su elevado nivel científico, me resulta aburrido y preocupante, lo siento y lo temo. Al final sólo me quedan algunas anécdotas, varias confirmaciones de Perogrullo y una sana envidia de sus amigos.

martes, 22 de junio de 2010

> Nuestro ciego destino

Cuando tenemos hijos ya estamos de más en este mundo (no se asusten, me refiero desde el punto de vista evolutivo). Si estamos aquí es con el objetivo de transmitir nuestros genes a otra generación, se vista como se vista, lo que nos asemeja a hormigas, osos y manzanos. Lo que desde luego nos diferencia de ellos es en cómo lo adornamos y cómo lo vendemos. Y no es poco mérito (recuerden a Bach o a Quevedo).

Pero el caso es que ya sobramos. Puede que tengamos una prórroga para comprarles la Wii o un año escolar en el extranjero, pero definitivamente ya no somos imprescindibles en el mundo. Quizá de ahí deriva la crisis de los cuarenta: se nos ha acabado el guión, ya hemos tenido progenie, y ahora tenemos que improvisar una obra nueva.

La esperanza de vida actual nada tiene que ver con la que ha sido casi siempre en la historia humana. Nos sobra tiempo, nos aburrimos y fíjense lo que hacemos y cómo está el mundo.

lunes, 21 de junio de 2010

sábado, 19 de junio de 2010

> Verdes Colinas Apple

El éxito comercial de Apple se basa en encerrar a sus usuarios en un bello mundo de fantasía. Sus productos tienen el sabor del diseño, la elegancia informal y el optimismo, pero lejos de aceptar el peaje que estos referentes suelen tener, la marca de la manzana vende a su cliente la pertenencia a un cerrado y bello condominio de los que ellos tienen la única llave.

No hay ordenadores tipo Mac de ninguna otra marca, la interfaz de usuario del iPhone sólo la encontrará en ese teléfono, la tienda AppStore o iTunes sólo pone a la venta lo que Apple considera apropiado…, etc. Hace poco Steve Jobs decía que en sus aparatos no tenía cabida la pornografía: “quien quiera porno que se vaya a Android” (el sistema operativo de Google).

Con el IPad ocurre lo mismo. No sólo no tiene ningún puerto externo de conexión (un simple USB), sino que no se le puede ampliar la memoria con tarjetas flash ni tan siquiera se le puede cambiar la batería cuando en unos años se agote su ciclo de vida: Apple prefiere darte un IPad nuevo antes que un destornillador para cambiarle la pila al tuyo. Es tan fuerte el carácter endogámico de la empresa que ni siquiera reparte dividendos a sus accionistas. Todo para adentro.

De la misma forma que el negocio de Carrefour no consiste en vender artículos sino en gestionar el dinero de los pagos a proveedores, el negocio de Apple consiste en vender urbanizaciones cerradas con piscina, zonas verdes y centros comerciales donde puedes sentirte seguro suponiendo que eres distinto. Justo es reconocer que así se vive muy bien, pero a cambio de algo que no nos importa perder, aunque sí nos importa que nos lo quiten y que con frecuencia no sabemos muy bien qué hacer con ello entre las manos.

miércoles, 16 de junio de 2010

> Adiós a Helen Thomas

Una ancianita de 89 años que podría haber estado haciendo calceta resulta que era la única que tenía asiento con su nombre en las ruedas de prensa de la Casa Blanca. Más que una periodista, era una tradición, a la que tanta querencia tiene la clase media norteamericana. Era como el pavo del Día de Acción de Gracias o el guante de béisbol que te regaló tu padre antes de morir en un incendio.

Esta buena señora, un día, en vez de hacer preguntas, dio las respuestas que consideró oportuno. Dijo que los israelíes deberían irse de Palestina, que deberían volver a Polonia o Alemania. Ser una tradición implica no moverse y salir siempre bien en las fotos, y ella se movió. Su presencia a partir de ese momento no estaba justificada: ya no era una tradición y sus 89 años no le permitían reinventarse y pedir perdón en una entrevista con Ophra Winfrye. El pavo se quemó y el guante tenía una etiqueta de ‘made in China’.

Dimitió y se ha ido a su casa. Sus compañeros de profesión le dan la espalda. Toda una vida resumida en este triste final sin haber matado a nadie. Al justo no se le perdona ni un desliz, si es que lo fuera, mientras que al sinvergüenza todas las oportunidades que se le dan representan una esperanza que todo lo justifica.


Referencia:
http://abcblogs.abc.es/fiebredelpotomac/2010/6/7/el-triste-final-helen-thomas
http://www.elpais.com/articulo/internacional/larguen/Palestina/elpepuint/20100607elpepuint_14/Tes

jueves, 10 de junio de 2010

> BP compra buena reputación

Google no es un servicio altruista de búsqueda de información, aunque lo parezca. Parece que no cobra sólo por resaltar ciertos resultados de lo que uno busca o por incluir en el lateral de la página publicidad relacionada, que es lo que sabíamos hasta ahora aunque casi ni nos dábamos cuenta.

Los ejecutivos de Google saben que casi todo el mundo recurre a ellos como primer paso para informarse, por lo que era lógico que su siguiente servicio fuera ofrecer a empresas una mejor posición para su visión de los hechos que los de la competencia o los críticos.

Cuando alguien busque información sobre la fuga de petróleo en el Golfo de México que ha provocado BP, Google tenderá a ofrecer primero los resultados que le resulten favorables a BP, en vez de las voces críticas. La empresa del buscador, por supuesto, cobrará un buen dinero por ello.

Si esto se toma como norma, no sería de extrañar que si buscásemos sobre el asalto israelí a la flotilla que se dirigía a Gaza, en vez de encontrar lo que casi es un consenso (al menos en número), encontremos la visión del ejecutivo de Netanyahu. Y la gente por lo general es poco crítica y perezosa para avanzar hasta la página quince de resultados. Como esto sólo está al alcance de gobiernos y grandes corporaciones, es un pasito más en alguna dirección.

A Ségolène Royal la han pillado citando a un personaje que nunca existió: lo cogió de la Wikipedia. Como somos prudentes y más limitados que Royal, no nos creamos lo que leemos: puede haber, hay, oscuros intereses buscando comprar tu opinión, que en realidad es tu dinero. Todos lo sabemos, pero actuamos como si no.


Referencia:
http://www.expansion.com/2010/06/09/empresas/tecnologia/1276100307.html
http://ecodiario.eleconomista.es/opinion-blogs/noticias/2212187/06/10/Paris-bien-vale-un-Roland-Garros-y-una-gafe-de-Segolne-Royal.html

martes, 8 de junio de 2010

> Si se queja de su suerte

Aunque no nos guste, somos el resultado de muchas pequeñas y grandes elecciones que hemos hecho durante nuestra vida. Admito la excusa de la suerte e incluso de que la elección no puede ser libre sin saber el resultado. De acuerdo, pero reclámele a los átomos de Demócrito.

Usted y no otro fue el que prefirió comer a entretenerse con otra cosa, y ahora está gordo. También fue usted el que eligió casarse con esa mujer, estudiar esa carrera o no estudiar y entrar a robar en una casa (o estudiar y entrar a robar en otra casa). Fue usted, y no otro, el que tomó la mayoría de las decisiones importantes de su vida, así que este resultado no le debería ser ajeno en nada. No se queje.

Si se siente desazonado lo único que le resta es preguntarse si ya es demasiado tarde. Si no tiene ningún problema, pruebe a leer el próximo artículo.

sábado, 5 de junio de 2010

> “El estado español”

Algunas veces la ñoñería es un arma cargada de futuro. Veo por televisión una improvisada rueda de prensa en el aeropuerto de El Prat, Barcelona, en la que tres activistas españoles y/o catalanes arremeten contra el gobierno israelí por el asalto a la flotilla de ayuda humanitaria a Gaza. Hablaban en castellano casi todo el rato, querían comunicar. Se guardaban muy mucho de decir España, hoy queda feo. Siempre se referían a “este país” como “estado español”, para a continuación referirse también a los políticos, periodistas o pueblo catalán, contraponiéndolos.

A mí esa forma de referirse a España me rechina, porque me suena a abuso, un abuso incontestable porque no se puede replicar. Es técnicamente correcto pero certeramente tocapelotas. No tengo esperanza de que en otro aeropuerto, un día, algún periodista a punto de ser despedido, les pregunte algo así como: “- Ustedes, entes, ¿cómo se sintieron cuando les ninguneaban los israelíes?”

miércoles, 2 de junio de 2010

> Conocimiento contemporáneo

Conocí el nombre del presidente de la diputación de Málaga, Salvador Pendón (PSOE), cuando se publicó que actualizaba rutinariamente su blog en horas de supuesto trabajo.

Conocí el nombre del presidente valenciano, Francisco Camps (PP), cuando se informó de los regalos que supuestamente le hacía la trama “Gürtel”.

Me quedé definitivamente con el nombre de la ministra de igualdad, Bibiana Aído (PSOE) cuando acuñó la palabra ‘miembra’ como femenino de ‘miembro’.

Me enteré del nombre del tesorero del PP, Luis Bárcenas, cuando en las escuchas telefónicas se referían a él como ‘Luis el cabrón’ sus compañeros de corruptela.

Recordé el nombre del ex presidente balear y ex ministro del gobierno, Jaume Matas (PP), cuando vi el palacete que se había comprado por dos duros en el centro de Palma.

Se me cayeron algunos palos del sombrajo cuando Francisco Neira aceptó un carguito e inició el currículum de tertuliano friki.

Pensé que esto no tiene remedio cuando nadie se dio por aludido en la declaración de Pilar Manjón en el congreso de los diputados. Y no pasó nada, nunca pasa nada.


Referencias:
http://www.almediam.org/PDF/asociacionafectados11m.pdf
http://www.youtube.com/watch?v=qa8yFtfngNE