sábado, 6 de marzo de 2010

> Diapositivas

Cuando era más joven dedicaba las vacaciones a viajar de mochilero por el estrecho mundo. Llevaba una cámara de fotos e hice varias miles de diapositivas de los lugares por los que fui. Curiosamente nunca tuve proyector.

Ahora, años después, me he encontrado dos cajas llenas de diapositivas que hacía tiempo guardé para nunca más sacar, aunque me he propuesto volverlas a la vida. He comprado un escáner de diapositivas y paciente me he dedicado a la tarea.

No todos los tiempos pasados fueron mejores, al menos para los encuadres: ¿cómo pude hacer esas fotos tan anodinas, cómo esos contraluces? Eso ya no lo puedo cambiar pero ¿por qué me tomo la molestia de escanearlas si la mayoría no merecen la pena? Supongo que porque alguna vez las quise, como Neruda.

La naturaleza está bien dotada. En la vejez llega un momento que sólo nos apetece dormir y que pasen los días sin pena ni gloria. Luego estamos ya cansados de la rutina y de los pequeños o grandes inconvenientes de la edad y de la situación, y entonces ya nos da igual y nos vamos en quince días. Todo esto ocurre después de abrir un armario y encontrarnos una caja de galletas llena de fotos antiguas, de paisajes y personas que ya no están y que pensamos que nos esperan al otro lado. Y a lo peor ni tan siquiera nunca tuvimos cámara.

4 comentarios:

  1. Ya que has hecho la inversión, estaría bien que de vez en cuando nos dejaras ver algunas. Siempre he sentido una insana envidia de tu "background" como viajero compulsivo y sthendaliano. Veo que sigue lloviendo y veo que afloran los melancólicos humores y los sinsabores de la ancianidad. Yo juraría que eres de los 70 y diría que te has pasado, pero el párrafo es tan puro y genuino Lugar...
    Siempre un placer leerte.
    Micro

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  2. "En la vejez llega un momento que sólo nos apetece dormir y que pasen los días sin pena ni gloria".

    Es verdad, cuando sólo apetece dormir y que pasen los días sin pena ni gloria quizás se esté en la vejez.

    Curiosamente nada que ver con la edad, ¿verdad?.

    Aunque con la edad casi todo se hace más despacito y llega antes el cansancio, pero eso tiene arreglo con el descanso.
    Y también es verdad que despacito, pasito a pasito, se puede llegar muy lejos.
    Besos.Pepi.

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  3. Hablando de dormir, tengo una impertinente curiosidad sobre Pepi. ¿Estás en otra zona horaria o eres noctámbula? Sin compromiso.

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  4. Para Micro: te decepcionarían. Son convencionales recuerdos de monumentos, paisajes y adoquines. Cuando las hice cargaba como galeote con una cámara réflex, y las fotos eran mediocres; ahora sólo hago fotos con el móvil y me gustan más (no sé dentro de unos años). Estas últimas son las que ilustran los artículos con foto.
    ¡Ay si yo contara!

    Para Pepi: sí, habría que hacer una loa del despacito, pero sobre todo del saber a dónde hay que ir.

    Para Pepi y Micro: me sumo a esa curiosidad. Micro como siempre llegó antes.

    Gracias por vuestros comentarios.

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