La clase media medio acomodada no repara en la existencia de otro mundo cercano en el espacio pero lejísimos de la vista. La clase media vive en ordenados pareados o en pisos con zonas comunes, pero otras personas (los que te instalan el teléfono, la cajera del supermercado, el que lleva treinta años viviendo con sus padres) pasan la vida en casas bajas desordenadas o en bloques altísimos unos muy juntos a otros y con vistas a las carreteras de circunvalación. En todas las clases sociales hay gente rara, pero cuando se tiene poco dinero la rareza se transforma en miseria, y no sólo económica.
A la biblioteca que frecuento acude puntual todos los días un hombre de mediana edad que sólo lee, paciente y sin levantar la vista, durante horas, libros de autoayuda; lleva años. El hijo de un vecino tiene más de cuarenta y no ha trabajado en su vida. La hermana de la barrendera tiene un hijo toxicómano y una hija con fibromialgia. En la piscina, en fin, el padre de familia que limpia los cristales lleva treinta años haciendo lo mismo…
No hay comentarios:
Publicar un comentario