martes, 10 de mayo de 2011

> Obama exposed

A Obama le dieron el premio Nobel de la paz muy rápido por contraste: hay que justificar menos dárselo a un negro que a un blanco, lo comparaban con el presidente Bush, y habla muy bien y tiene apostura. El primer sorprendido fue él, sin duda. Luego Neira y Aznar.

Pero ahora hay un problema (varios). No ha cumplido, ni parece que lo vaya a hacer, su promesa de cerrar Guantánamo. Y justifica como obvio la operación para matar a Osama Bin Laden. Sigue siendo negro, sigue hablando bien y sigue teniendo apostura, pero ¿cómo un Nobel de la paz justifica ese contenido?

En la lista de los ganadores de ese premio se encuentran otros presidentes como Woodrow Wilson (1919), Roosevelt (1906) y Carter (2002), y personajes tan discutibles como Henry Kissinger (1973), Isaac Rabin, Shimon Peres y Arafat (1994), y Menachem Begin y Sadat (1978). Esto nos indica el rumbo del galardón, pero nos habíamos hecho ilusiones.

Y ahora a lo práctico, aunque pueda resultar algo obsceno: qué envidia de la profesionalidad, de la razón de estado, de anteponer los intereses. Hay una continuidad en esa línea que distingue a los países que progresan de aquellos que cada cuatro años vuelven a empezar de cero. Ya lo he dicho: qué envidia de esa obscena fortaleza.

1 comentario:

  1. ¿Envidia de la razón de Estado, de anteponer los intereses...?
    ¿Pero qué intereses? Netanyahu acaba de dejar claro que los intereses del presidente de la gran superpotencia van a tener que subordinarse a un interés más poderoso, y no precisamente el interés “del Estado de Obama”. Al menos queda claro “quiénes mandan sobre los que mandan en el mundo” y cuáles son los intereses con mayúscula, los intocables.

    Y el premio nobel “preventivo” a Obama acabó de desprestigiar el premio. Ahora lo vemos:
    Todo un premio nobel de la paz enorgulleciendose de haber asesinado a un terrorista desarmado y a quienes le acompañaban. No critico que se elimine a terroristas sanguinarios, sino que se ataque militarmente una casa de un país no en guerra, “con un 80% de certeza de localización del sospechoso”, se asesine a todos los hombres y alguna mujer que pasaba por allí, sean culpables o inocentes, después –no antes- se les identifica y tras confirmar el éxito se elimina el cadàver y se anuncia la gran notícia. ¿Cuántos inocentes habrán muerto en anteriores operaciones fallidas y no publicitadas?¿Como puede Obama hablar de justícia si no ha habido juicio? Y si no hace falta juicio por tratarse de un acto de guerra, entonces ¿Al Qaeda es un ejército y por tanto sus acciones están legitimadas?

    En todo caso, qué triste ver a un premio nobel de la paz enorgullecerse de todo eso. Obama exposed, ¡ y bien exposed!

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