En la retransmisión de la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Pekín que hizo TVE el pasado viernes los comentaristas tenían tanto interés como la propia ceremonia, aunque por otras razones. Comprendo que un locutor no tenga que ser catedrático, pero al menos debería saber leer y sonarle alguna cosa de la cultura universal.
Sin ánimo ni posibilidades de ser exhaustivo (vi sólo un resumen, y de éste sólo una parte), recuerdo la cita culta que los dos presentadores hicieron sin rebozo ante la imagen de los “3.000 discípulos de Confucio” (¿?), quien “escribió las Anacletas” (sic). ¿Estarían pensando en Mortadelo y Filemón, o leyeron mal y sin sonrojo el dossier que seguro les pasaron los organizadores de la ceremonia?
Cuando un gigantesco rollo de papel se desplegó en el escenario y pasó a ser el soporte de buena parte de la representación, no dejaron de llamarlo “rollo de pergamino” (que es justo lo opuesto al papel chino, ya que el pergamino se hacía con pieles de animales). Seguro que su formación ha recalado en las películas de Indiana Jones.
Supongo que para no aturdir con su sabiduría a los pobres telespectadores, en varias ocasiones aludieron a “la época de un emperador chino muy antiguo”. Para qué mas, si ya se ha cumplido.
De deportes sabrán mucho, pero de leer el texto oficial de la ceremonia, poco. Y eso que una de las comentaristas ha aprobado hace poco las oposiciones y ya es funcionaria del Ente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario