Lo he visto en un anuncio de la obra social de Caja Madrid. Es parecido a lo que proponía Endesa hace unos meses, y no muy distinto del eslogan de la campaña de Obama en EE.UU. Hay muchos más ejemplos.
Con un poquito de música enaltecedora, un colectivo apropiado y puro (niños) y una imaginería de proximidad (color de los años setenta, blanco y negro o personas de la calle como usted o como yo), la señora que está en casa con la costura y el señor que está en el sofá cansado del trabajo levantarán los ojos y verán durante veinte segundos (hasta que empiece el anuncio de las sopas de sobre) lo buenas que son las corporaciones que van a hacer tantas cosas para cambiar el mundo en el que se desarrollan tan prósperamente. Por cada pañal que compremos enviarán una vacuna a los negritos, por cada apertura de libreta encontrarán un trabajo a un subnormal o por cada voto cambiarán para bien su futuro.
Que me cuenten cómo es ese nuevo mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario